15 mayo 2006

Como abordar la enfernedad


Los especialistas españoles han elaborado un documento de consenso sobre cómo tratar la patología. Abogan por combinar medicamentos, ejercicio y psicoterapia
En la actualidad no hay ningún fármaco autorizado para esta enfemedad.

La fibromialgia es una de las enfermedades que más insatisfacción causa a los profesionales y a los pacientes por la escasa información sobre cómo tratarla. La Sociedad Española de Reumatología ha elaborado un documento de consenso donde se analizan los diversos aspectos de la enfermedad, los factores que la desencadenan y su tratamiento.
La fibromialgia es una enfermedad crónica en la que el dolor persiste, generalmente sin cambios, a lo largo de muchos años y que además produce un gran impacto sobre la calidad de vida, la capacidad funcional, el estado emocional y las relaciones personales.
En la actualidad no existe ninguna prueba diagnóstica de certeza para la fibromialgia, así que se diagnostica mediante una exploración de los síntomas del pacientes. Tampoco se conocen el origen ni el tratamiento idóneo de esta patología.
Para arrojar un poco de luz sobre el tema, la Sociedad Española de Reumatología (SER) ha elaborado un documento de consenso sobre la enfermedad. "Con él pretendemos dar un soporte a los reumatólogos para enfrentarse a este síndrome multisintomático", señalan los coordinadores del documento, Cayetano Alegre, del Hospital Universitario Vall d´Hebron de Barcelona y Javier Rivera, del Instituto Provincial de Rehabilitación de Madrid.
El conocimiento que el paciente adquiera sobre su enfermedad, el tratamiento farmacológico, la realización diaria de ejercicio físico moderado y la terapia psicológica, son los pilares básicos del tratamiento.

Algunos fármacos

Los medicamentos pretenden mejorar aspectos parciales de la enfermedad, no a su curación. En la actualidad no existe ningún fármaco aprobado por la Agencia Europea del Medicamento o su homólogo estadounidense (FDA) para tratar la fibromialgia, aunque según la revisión sistemática de la SER, algunos fármacos sí pueden resultar útiles en la patología. Estas son las evidencias sobre los tratamientos disponibles:
Analgésicos y antinflamatorios. No existe ninguna evidencia de la eficacia de los antinflamatorios en el tratamiento de la fibromialgia. Existe una evidencia débil en la actualidad sobre la eficacia del derivado opiáceo tramadol para el control del dolor.
Relajantes musculares. La ciclobenzaprina, a dosis bajas, ha mostrado utilidad en la mejoría del dolor y el sueño, pero su efecto se atenúa con el paso del tiempo.
Antidepresivos tricíclicos. Este tipo de fármacos, a corto plazo, produce una mejoría clínicamente significativa en un tercio de los pacientes. La mejoría es moderada en el dolor, calidad del sueño y sensación de bienestar, leve en la sensación de fatiga y mínima en el número de puntos dolorosos.
Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina. Los modernos antidepresivos son útiles para tratar los síntomas depresivos, pero apenas son eficaces para el tratamiento del dolor si no existe depresión asociada. En este sentido, los inhibidores duales de la recaptación de serotonina y noradrenalina parece que son más eficaces.
Otros fármacos. Hay un gran número de fármacos de diversa índole (como la hormona de crecimiento, la melatonina o la gabapentina) que no han demostrado hasta la fecha una eficacia que avale su uso en la fibromialgia.
Según el documento de consenso, es importante racionalizar al máximo el uso de fármacos, en especial si presentan efectos centrales, ya que algunos síntomas (cansancio, inestabilidad, mareos, dificultad de concentración...) pueden exacerbarse con el tratamiento.

Algo más que medicamentos

Además, existen importantes evidencias de que combinar tratamiento psicológico y ejercicio mejoran la calidad de vida del fibromiálgico.
El ejercicio aeróbico, en cualquiera de sus modalidades (natación, bicicleta, ejercicios en el suelo, danza, etc.) ha mostrado en ensayos clínicos un efecto beneficioso en el dolor, la salud mental, la ansiedad y la calidad de vida del paciente.
El tratamiento psicológico, por su parte, pretende controlar los aspectos emocionales (ansiedad y depresión), conductuales y sociales que agravan el cuadro clínico de estos pacientes. La terapia cognitivo-conductual (enseñar al paciente cómo reducir y evitar el estrés) es la intervención psicológica que ha demostrado una mayor eficacia.
Todavía no se ha podido demostrar que el tratamiento multidisciplinar (combinando las estrategias disponibles) sea lo más eficaz. De todos modos, los autores del consenso creen que es lógico pensar que la combinación de varias de las modalidades terapéuticas es superior al uso de cualquiera de ellas en solitario. "Proponemos como tratamiento básico en los pacientes con fibromialgia una combinación de ejercicios físicos, terapia cognitivo-conductual y tratamiento farmacológico a base de analgésicos, tricíclicos a dosis bajas y relajantes musculares", resumen.
En cuanto a las medicinas complementarias, todavía no hay suficientes evidencias de que terapias como la acupuntura, la homeopatía o los masajes resulten eficaces.

Pistas sobre su origen

Aunque poco se sabe sobre la fibromialgia, cada vez empiezan a existir más datos sobre sus posibles causas y desencadenantes. El documento de los reumatólogos españoles también repasa algunos de ellos.
Así, existen indicios de que algunas variantes genéticas son más frecuentes en los fibromiálgicos, como el gen regulador de la proteína transportadora de serotonina (un neurotransmisor relacionado con el estado de ánimo).
Algunos grupos de pacientes tienen además una serie de factores comunes que podrían predisponer a la enfermedad, como situaciones traumáticas en la infancia o trastorno de ansiedad. En muchos afectados, el cuadro clínico aparece bruscamente tras ciertos acontecimientos: accidentes de tráfico, infecciones, cirugías mayores y, en general, las situaciones de estrés postraumático.
En cuanto a los mecanismos patogénicos, se ha investigado en varios campos. Según los autores, se han encontrado diversas alteraciones morfológicas y funcionales en biopsias de músculo y de tejidos blandos en estos pacientes. Sin embargo, los hallazgos son bastante inespecíficos. También se han visto alteraciones en el sistema endocrino responsable de la respuesta al estrés, el llamado eje hipotálamo-hipófiso adrenal.
Los datos más recientes sugieren además que los fibromiálgicos sufren una alteración de los mecanismos de procesamiento del dolor, probablemente por un desequilibrio en el sistema nervioso central.
Según los autores del consenso, uno de los hallazgos más consistentes ha sido un incremento de la sustancia P en líquido cefalorraquídeo. La presencia de este péptido favorece la trasmisión de los estímulos dolorosos, ya que facilita la estimulación de las vías dolorosas por otros neurotrasmisores. También se han hallado alteraciones en la concentración de otros neurotrasmisores cerebrales como serotonina y noradrenalina.

Decalogo contra la fibromialgia

CONSEJOS DE LOS REUMATÓLOGOS
Constancia, ejercicio, precaución con los medicamentos... Estos son, según la Sociedad Española de Reumatología, algunos de los consejos que deben seguir los afectados por fibromialgia
Con todo, la fibromialgia es una enfermedad que puede controlarse, tal y como pone de manifiesto el decálogo que acaba de elaborar la Sociedad Española de Reumatología:
APRENDA A CONVIVIR CON SU DOLOR
No hay recetas ni píldoras mágicas para la fibromialgia y el dolor crónico. Por ello, el primer paso para controlarlo es asumir que el dolor puede persistir para siempre y que, por tanto, en adelante, va a formar parte de nuestra vida. Cuando se asume el dolor, se aprende a reconocerlo y a saber lo que lo mejora o empeora. Estamos entonces en situación de buscar soluciones y de volver a disfrutar de la vida.
CONTROLE SUS EMOCIONES
Muchas personas con esta enfermedad desarrollan sentimientos negativos que antes no presentaban y que les hacen convertirse en una persona diferente. Enfado, ira, depresión, frustración, sensación de fracaso, culpa y vergüenza... Debe aprender a controlarlos para que no se cronifiquen y se conviertan en un problema añadido. Reconozca todo lo positivo que le sucede en la vida: a pesar del dolor no es un incapacitado y puede hacer muchas más cosas de las que piensa.
CONTROLE SU ESTRÉS
El estrés es, básicamente, la respuesta del organismo cuando afrontamos un peligro y nos preparamos para luchar o para huir. La mejor manera de combatir este estrés perjudicial es, en primer lugar, reconociendo cuál es la causa del nuestro, y evitando las situaciones que lo favorezcan.
También es útil organizar y planificar nuestras actividades diarias, y dedicar diariamente tiempo a la relajación. Esta se practica siguiendo determinadas técnicas (como la respiración profunda o la relajaciòn muscular) que pueden aprenderse con un corto entrenamiento.
EVITE LA FATIGA
Tan negativo es permanecer en inactividad, como realizar un número excesivo de tareas. No intente ser un perfeccionista; planee sus obligaciones, y elimine o delegue aquellas que no sean estrictamente necesarias. Intercale periodos de descanso entre los de actividad, y haga sus tareas a un ritmo que pueda controlar.
HAGA EJERCICIO
Posiblemente es el aspecto terapéutico más importante para el tratamiento de la fibromialgia. El ejercicio no sólo mantiene en forma los músculos y pone a punto el sistema cardiovascular, sino que disminuye el dolor, favorece el sueño, mejora la sensación de fatiga y disminuye la ansiedad y la depresión.
Caminar, correr, andar en bicicleta o bailar, son ejercicios aeróbicos que favorecen el control de la enfermedad. Comienze a realizar el ejercicio de una forma suave y vaya progresivamente incrementando su intensidad y duración, hasta realizarlo de 20 a 40 minutos, como mínimo tres días a la semana. Al principio es posible que su dolor se incremente, pero progresivamente irá disminuyendo.
RELACIÓNESE CON LOS DEMÁS
Todos sabemos cómo alivia nuestras preocupaciones la conversación con los amigos y compañeros. Cuente a los demás lo que le pasa y cómo no puede hacer siempre las cosas que hacía antes, pero evite que la comunicación se centre continuamente en su dolor.
PROTEJA SU SALUD
La depresión que puede acarrear el dolor crónico determina que se abandonen los buenos hábitos de salud. El tabaco, nocivo para cualquier aspecto de la salud, es también un excitante del sistema nervioso que hace más difícil el control del dolor. Lo mismo sucede con la cafeína y el exceso de alcohol, el cual puede además interferir con la medicación. Vigile su peso, y haga ejercicio para mantenerse en forma.
USE CON PRECAUCIÓN LOS MEDICAMENTOS
Muchos de los síntomas de la fibromialgia mejoran con medicación. Los analgésicos y antinflamatorios, que tan eficaces resultan en el dolor agudo, no funcionan tan bien en el dolor crónico de la fibromialgia, aunque son útiles en muchos pacientes.
Existen analgésicos más potentes, denominados opiáceos, que pueden ser empleados en la fibromialgia, siempre que los recomiende un médico experto en su empleo. Otros fármacos, como los anticonvulsivantes y los antidepresivos, también pueden disminuir el dolor.
Algunos medicamentos pueden mejorar el sueño, los trastornos psicológicos, las molestias intestinales, etc…pero, lo más importante es que la persona que padece esta enfermedad evite el automedicarse, y se ponga en manos de un médico experto en el tratamiento del dolor crónico y en el uso de las medicaciones anteriormente mencionadas.
USE CON PRECAUCIÓN LAS MEDICINAS ALTERNATIVAS
Como con frecuencia los medicamentos tienen un resultado solamente parcial, es habitual que muchos enfermos busquen soluciones en las terapias alternativas. Algunas de estas terapias mejoran el dolor y pueden favorecer el control de estrés, como el yoga, la acupuntura, quiropraxis, masaje, Tai-Chi, homeopatía…
La medicina alternativa puede ser cara, y no está regulada por las guías médicas. Por ello, se debe recomendar al paciente que consulte siempre con su médico antes de comenzar cualquier terapia de medicina alternativa, ya que algunas pueden interferir con el tratamiento estándar o habitual. Desconfíe si le prometen curación, si le recomiendan que abandone la terapia con medicinas, o si le dicen que el tratamiento es un secreto y solo puede ser administrado por ciertos proveedores.
SEA CONSTANTE
La paciencia es una virtud importante; conseguir resultados puede tardar algún tiempo. No lo eche todo a perder porque tenga un "día malo". Aunque haya conseguido estabilizar su enfermedad, los "días malos" inevitablemente aparecerán y debe estar preparado para afrontarlos. En esos días, salga de casa y relaciónese con los demás, mantenga sus compromisos habituales y procure dedicar más tiempo a relajarse.

12 mayo 2006

Dia Mumdial de la Fibromialgia

Los afectados por la fibromialgia subrayan la dureza de su enfermedad

BARCELONA, 12 de mayo de 2006
Mari Carmen Martínez lleva más de 30 años afectada por la enfermedad de la fibromialgia, más de 30 años conviviendo con el cansancio perpetuo y el dolor constante en los músculos y articulaciones. Debido a su enfermedad, Mari Carmen tuvo que dejar de trabajar hace 2 años. Su caso no es ni mucho menos único. Hoy se celebra el día mundial de la fibromialgia que afecta, según datos oficiales, a cerca del 3 por ciento de la población de España.
La fibromialgia no tiene cura y su causa todavía es un misterio para la ciencia, pero lo cierto es que el dolor que sufren los afectados de esta enfermedad es muy real y acaba por deteriorar significativamente la calidad de vida de quienes lo sufren.
El dolor es el síntoma característico, pero no el único. "La falta de concentración y memoria, la vejiga irritable, la ansiedad y el cansancio" son otros síntomas propios de síndrome, tal y como explicó a Europa Press Televisión la presidenta de la Asociación
Catalana de Afectados de Fibromialgia, Teresa Ribera.
"Cuando una persona vive con el dolor durante 24 horas al día" lo normal es que al final acabe sintiendo "un cansancio descomunal", apuntó Ribera, que no sólo es presidenta de la asociación sino que además padece la enfermedad desde 1998, un año antes de que se fundara ACAF.
Otro de los grandes problemas del síndrome es que es muy difícil de diagnosticar. No hay una prueba de laboratorio ni rayos X que pueda ayudar a un médico a diagnosticarla. Martínez relató el calvario por el que tuvo que pasar antes de que los médicos dieran con la enfermedad que tenía: "No sabían lo que tenía. Iba al médico y me decía que podía tener artrosis, desgaste de huesos... Me daba tratamiento para una cosa, para otra, pero los dolores seguían y así me tiré muchísimo tiempo".
LOS FAMILIARES NO LES COMPRENDEN
Además, los afectados no sólo tienen que hacer frente al cansancio y al dolor, sino también a las críticas de los que les rodean, que con frecuencia no pueden comprender su enfermedad. "Se nos juzga mal, se nos tacha de personas histéricas, vagas, nerviosas", aseguró la presidenta de ACAF.
En las 28 sedes territoriales con las que cuenta ACAF en Cataluña se realizan distintas actividades dedicadas a mejorar la calidad de vida de los enfermos de fibromialgia. "Atención personalizada, taichí, gimnasia suave, estiramientos, relajación", enumeró Ribera.
"Las clases es la única cosa que tenemos para poder seguir luchando y mejorar", dijo Josefina Folqué, que padece fibromialgia desde hace 30 años".
La Fibromialgia no tiene cura, al desconocer la causa de la enfermedad no existe ningún medicamento. "La única solución para mejorar un poco nuestra calidad de vida" es "aprender a vivir, a llevar el dolor" y seguir un "tratamiento especializado", señaló Ribera.

11 mayo 2006

¿que es la fibromialgia?




Qué es la Fibromialgia?
Es una enfermedad que se caracteriza por dolor crónico generalizado, no articular, y sensación dolorosa a la presión de unos puntos sensibles específicos.
Fig. 1.Puntos dolorosos de la fibromialgia







Occipucio: inserciones del músculo suboccipital. Cervicales inferiores: cara anterior de los espacios intertransversos C5-C7.Trapecio: punto medio del margen superior.Supraespinoso: en los orígenes, por encima de la escápula. Segunda costilla: segunda unión costocondral.Epicóndilo lateral: 2 cm distalmente al epicóndilo lateral.Glúteo: cuadrante superior externo de la nalga.Trocánter mayor: posterior a la prominencia del trocánter. Rodilla: cojín adiposo de la cara interna de la rodilla, cercano a la articulación.
Criterios diagnósticos de Fibromialgiadel American College of Rheumatology (ACR) de 1990:
Historia de dolor generalizado presente durante más de 3 meses.DEFINICIÓN: se considera dolor crónico generalizado cuando:
*Está presente en ambos lados del cuerpo. *Está presente por encima y por debajo de la cintura.
También hay dolor en el esqueleto axial (cervicales, dorsales, lumbares y pared torácica anterior).
Dolor a la presión digital en 11 de los 18 puntos definidos (al ejercer una presión equivalente a 4 kg. de peso, estos puntos sensibles son exageradamente dolorosos).







Qué es lo que produce el dolor?
El cuerpo humano tiene mecanismos que lo protegen habitualmente contra el dolor. Si no existiesen estos mecanismos, seríamos conscientes constantemente de nuestro organismo y de nuestros músculos y articulaciones. Se considera que en las personas afectadas de fibromialgia estos mecanismos tienen un funcionamiento anormal, lo que provoca un incremento en la percepción del dolor. Una pequeña sobrecarga en una parte del cuerpo es suficiente para notar sensaciones dolorosas. Así pues, nos encontramos ante un trastorno del Sistema Nervioso; concretamente, de los mecanismos que procesan los estímulos dolorosos, que da lugar a un umbral del dolor extremadamente bajo.
Cuál es el síntoma más importante?
El dolor musculoesquelético con un mínimo de tres meses de duración, de localización difusa y en diversas partes del cuerpo, como la zona lumbar, el cuello, los hombros, la zona pélvica, codos y manos, que además afecta a ambos lados del cuerpo (izquierda y derecha) y tanto por debajo como por encima de la cintura.
Cómo y en qué partes se nota el dolor?
Las personas que padecen fibromialgia describen el dolor como quemazón, punzadas, pesadez, palpitación o molestia. Es frecuente que el dolor se note en los músculos que más se ejercitan y, en general, en las partes mencionadas anteriormente.
Qué otras molestias produce en el aparato locomotor?
Puede provocar rigidez generalizada, sobretodo al levantarse por las mañanas y sensación de inflamación en manos y pies. También se puede sentir un hormigueo poco definido que afecta de forma difusa, sobretodo a las manos. Son muy frecuentes, también, las contracturas musculares, sobretodo en el músculo trapecio.
Provoca cansancio?
Sí, en la mayoria de los casos. Las personas que padecen fibromialgia tienen poca tolerancia al esfuerzo y se sienten como si les faltase energía. Esto hace que cualquier ejercicio de intensidad inusual les provoque dolor, por lo cual intentan evitar el esfuerzo físico. La consecuencia es que cada vez realizan menos esfuerzo, la masa muscular se empobrece y el nivel de tolerancia al ejercicio disminuye aún más. De aquí la necesidad de mantener un ejercicio físico suave pero con constancia.
El sueño también se ve afectado?
Sí. Entre un 70-80% de las personas con fibromialgia se quejan de tener un sueño de mala calidad y del hecho que el dolor empeora los dias que duermen mal. Los investigadores piensan que estos enfermos se quedan dormidos sin problemas, pero que presentan alteraciones en la fase del sueño profundo. Los registros electroencefálicos presentan alteraciones en esta fase y se detectan unas ondas similares a las que mantienen el estado de alerta del cerebro. Se desconoce si estas ondas están relacionadas con el origen de la enfermedad o son consecuencia de ella. En cualquier caso, los trastornos del sueño tienen una gran importancia en la fibromialgia, siendo imprescindible tratarlos para poder alcanzar mejoras posteriores.
Qué otros síntomas se presentan con más frecuencia?
Son frecuentes la ansiedad, la irritabilidad y la depresión como consecuencia del estado crónico de dolor y fatiga que se padece. También son frecuentes la migraña, trastornos de la circulación en las extremidades, el llamado síndrome del colon irritable, cefalea tensional, urgencia miccional, disfunción temporomandibular, dolor miofascial, dolor pelviano crónico, sequedad de boca y ojos y, en mujeres, dolores durante la menstruación. También son bastante frecuentes los trastornos cognitivos (dificultades en la atención, la memoria y la concentración).
Qué factores pueden empeorar los síntomas?
Los cambios de temperatura y humedad ambiental, el incremento de la actividad física, el estrés, la depresión, la ansiedad y las fluctuaciones hormonales (los estados premenstruales y menopáusicos).
Se puede padecer fibromialgia junto con otras enfermedades?
Sí. La fibromialgia puede ser la única enfermedad que se padezca, pero es frecuente que una persona tenga otras enfermedades reumatológicas, como artrosis, artritis o lupus, entre otras. Así mismo, el hecho de padecer fibromialgia no descarta que se pueda padecer cualquier otra enfermedad. Por esta razón, las personas enfermas de fibromialgia deben consultar a su médico siempre que noten alguna molestia que no atribuyan directamente a la fibromialgia que padecen.
Cuáles pueden ser las causas de la enfermedad?
Se han dado casos en los cuales la enfermedad empezó después de un acontecimiento puntual, como una infección bacteriana o vírica, un accidente de automóvil, una separación matrimonial o divorcio, problemas con los hijos, etc. Otras veces, aparece después que otra enfermedad conocida (p.e. artritis o lupus eritematoso) limite la calidad de vida del enfermo. En cualquier caso, lo más probable es que no sean éstas las verdaderas causas de la enfermedad, sino que se trataría de factores desencadenantes de la aparición de la sintomalogía en personas que ya padecen una anomalía -hasta entonces "oculta"- en sus mecanismos de regulación de la capacidad de respuesta frente al dolor y al estrés.
Qué investigaciones se están llevando a cabo sobre la causa o los mecanismos que provocan esta enfermedad?
Se pueden encontrar muchos trabajos publicados cada año en la literatura médica sobre este tema. Los estudios se han orientado a analizar si existe en los enfermos afectación sobre los músculos, el sistema immunológico, anomalias psicológicas, problemas hormonales o alteraciones en los mecanismos de regulación del dolor. Los resultados parecen prometedores, pero aún no hay resultados concluyentes al respecto.

Es una enfermedad nueva?
Parece ser que no, puesto que en el siglo XVIII los médicos europeos ya comentaban la existencia de reumatismos articulares y no articulares, y en 1904 Sir William Gowers hablaba de una enfermedad reumática que afectaba al tejido fibroso. No obstante, la investigación de sus causas empezó a mediados de los años 80 y los criterios para su diagnóstico datan de 1990. La fibromialgia o SFM (Síndrome de Fibromialgia) fue reconocida como enfermedad por la OMS (Organización Mundial de la Salud) en el año 1992.
Es una enfermedad incapacitante?
En el sentido de incapacidad irreversible por deformación o destrucción de articulaciones, no. No obstante, la fibromialgia puede ser muy incapacitante en lo que respecta a la dificultad para realizar diversas actividades. Los estudios realizados en este sentido han concluido que la fibromialgia puede ser tan incapacitante como la artritis y más que otros procesos como la bronquitis crónica o la "diabetes mellitus".
Además de los puntos dolorosos, se encuentran otras alteraciones en la exploración?
Sí. En la exploración física pueden localizarse contracturas y espasmos musculares. Por otro lado, la piel suele presentarse más sensible al enrojecimiento, que se produce tan sólo presionando con la mano sobre cualquier parte del cuerpo (consecuencia de pequeñas alteraciones en la regulación del riego sanguíneo de la piel).
Hay alguna prueba que confirme el diagnóstico de la enfermedad?
Las radiografías y los análisis, si bien se han de realizar, sólo sirven para descartar la presencia de otras patologías, pero no son determinantes para su diagnóstico. Lo mismo pasa con los métodos más modernos, como el TAC (Tomografia Axial Computerizada) o la resonancia magnética, los cuales no permiten -mediante su uso habitual- detectar ninguna alteración determinante para el diagnóstico de la enfermedad. Actualmente, hay numerosas investigaciones abiertas alrededor del mundo, con el fin de poder encontrar otras pruebas y nuevas herramientas de control que hagan posible un diagnóstico más claro y definitivo.
Tiene cura la fibromialgia?
La fibromialgia es una enfermedad crónica para la cual, actualmente, no existe cura. No obstante, sí que existen una serie de medidas que han demostrado mejorar, en muchas ocasiones, la calidad de vida de estos enfermos: un correcto diagnóstico, la explicación al paciente de la naturaleza de su enfermedad (explicarle que no causará destrucción de las articulaciones, ni lesiones irreversibles ni deformidades), la educación para procurar que evite los factores agravantes, el tratamiento -si fuese el caso- de las alteraciones psicológicas, el tratamiento de las posibles alteraciones del sueño, cambios en el comportamiento y en los planteamientos vitales, el ejercicio físico suave y moderado, la realización de técnicas de relajación muscular, el uso de analgésicos y medicamentos que aumenten la respuesta al dolor y también, en algunos casos, el uso de terapias complementarias (como la acupuntura, la homeopatía, la naturopatía y la fitoterapia).
Es importante el ejercicio físico?
El ejercicio físico y un adecuado fortalecimiento de los músculos son, sin duda, de gran eficacia. Hace falta, pero, trabajar poco a poco, realizando un ejercicio suave y de forma gradual, dado que la práctica de ejercicio por encima de la capacidad física del enfermo empeora el dolor y la tensión muscular por lo que invita a abandonar el esfuerzo. Se recomienda, pues, la actividad aeróbica moderada (como pasear o caminar sobre una cinta rodante, la hidrogimnasia o la bicicleta), después de la valoración por parte del médico y con la ayuda de terapéutas físicos o monitores especializados. La práctica de algunas disciplinas orientales, como el tai-chí y el chi-qung, practicadas de forma muy suave y progresiva, han demostrado, también, su eficacia en un gran número de casos. Aún así, cada persona tendrá que aprender, con voluntad y constancia, cuál es el tipo de ejercicio que le proporcionará unos mejores resultados
Son eficaces los medicamentos?
Es cierto que, en la fibromialgia, la eficacia de los medicamentos suele ser parcial, haciéndose necesaria la combinación de diferentes fármacos. Hoy por hoy, no existe una medicación específica para esta enfermedad, empleándose fármacos ya conocidos para otras enfermedades en dosis más bajas a las habituales. La medicación suele basarse en una asociación de tricíclicos (en dosis más bajas que para la depresión), analgésicos, inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, ansiolíticos y relajantes musculares, entre otros. En cualquier caso, tendrá que ser el médico quien determine cuál puede ser la mejor medicación para cada paciente.
En qué consiste el tratamiento de la fibromialgia?
El tratamiento de la fibromialgia, debería contemplar diversas vertientes: la educacional (tener la información necesaria sobre la enfermedad y sobre lo que conlleva), la farmacológica , la física y la psicológica (una terapia cognitivo-conductual, con el fin de ayudar en los necesarios cambios de comportamiento, y buscando el refuerzo de la autoestima y de los mecanismos de control para afrontar los diversos aspectos de la vida diaria). Es muy importante el intercambio de impresiones y la convivencia con otras personas afectadas (sobretodo en el ámbito asociativo), y en talleres colectivos de recuperación funcional y de mantenimiento de la forma física (tai-chí, chi-qung, etc.). Abordando todos estos aspectos, es posible, en muchos casos, conseguir una importante mejora en la calidad de vida de las personas afectadas de fibromialgia.
Cuál es el pronóstico de la enfermedad?
Los estudios a largo plazo sobre la fibromialgia han demostrado que se trata de una enfermedad crónica, si bien sus síntomas pueden ser oscilantes (pueden aparecer, desaparecer y reaparecer en distintas épocas). El impacto que produce en la calidad de vida de quien la padece varía mucho de unas personas a otras, pero siguiendo todas las pautas explicadas es posible lograr una mejora de muchos de sus síntomas. Es de esperar, también, que se vayan haciendo nuevos descubrimientos y que se desarrollen nuevos fármacos específicos para el tratamiento de la fibromialgia. Con todo, podemos tener la esperanza que la calidad de vida de todas las personas afectadas pueda ir mejorando día a día, hasta el momento en qué la ciencia pueda aportarnos una posible cura para esta enfermedad.


http://www.medicinainformacion.com/fibromialgia_libros.htm



Dedicado al Dr. Perez Vara (un reciclaje urgente)